jueves, 15 de noviembre de 2012

Información (necesaria pero no suficiente) para la adherencia a medicamentos



15 de noviembre: más de 70 hospitales de todo el país celebrarán el ‘III Día de la Adherencia e Información de Medicamentos‘, una jornada promovida por la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH) con el objetivo de concienciar a la población sobre la importancia de cumplir con los tratamientos prescritos, de informarse sobre los medicamentos que debe tomar y, en definitiva, de responsabilizarse de su salud.
Según los datos de una encuesta elaborada por la SEFH, hasta un 21% de los pacientes reconoce no haber tomado alguna de las dosis prescritas durante el último mes, principalmente por un olvido. 
Para una mejor adherencia es necesaria una información adecuada sobre los medicamentos, ya que si no se corre el riesgo de abandonar el tratamiento; y las consecuencias de ello, las encontramos, tanto de salud como económicas, derivadas de un fracaso terapéutico.
La cuestión es que la información es necesaria pero no suficiente. Para facilitar la adherencia sería importante:
  1. reforzar aspectos que funcionan bien del medicamento y la manera en que un paciente se lo toma 
  2. entender los motivos de la no adherencia 
  3. preguntar
  4. escuchar
  5. empatizar en las situaciones o problemas que hacen difícil la adherencia
  6. buscar soluciones y alternativas
  7. llegar a un acuerdo
  8. ratificar el acuerdo
  9. reforzar al momento de conseguirlo así como en el futuro ante avances conseguidos.

Las Jornadas como el Día de la Adherencia buscan concienciar y recordar a todos que en el hospital, en atención primaria o en las oficinas de farmacia hay un profesional, el farmacéutico, que puede proporcionarles apoyo, aclarando dudas o dando recomendaciones.
Entre otros aspectos, los materiales divulgativos diseñados para esta Jornada incidirán en la importancia de la información para evitar –o subsanar– los efectos secundarios o la toma de medicamentos no indicados en ciertas condiciones o estados, caso del embarazo. Y es que la falta de adherencia –o el mal cumplimiento de los tratamientos–, problema que afecta a más de la mitad de los pacientes y se agudiza en el caso de los enfermos crónicos, conlleva no solo un peor control de las enfermedades, sino también un mayor número de hospitalizaciones.
Está demostrado que una mayor adherencia disminuye los riesgos para los pacientes, así como los costes para el sistema sanitario y un paciente informado es un paciente más responsable, más implicado en el cuidado de su salud, lo que supone un menor riesgo de incumplimiento o de cumplimiento inadecuado.
Destacar que se puede accederse a la información de la Jornada a través de la página web habilitada por la SEFH y de su cuenta en Facebook, en las que se invita a pacientes y ciudadanos a que rellenen un cuestionario para autoevaluar el conocimiento que tienen sobre los medicamentos.

martes, 13 de noviembre de 2012

Cuando me comunican una mala noticia


Comunicar malas noticias es, probablemente, una de las tareas más difíciles que deben enfrentar los profesionales de la salud. Los profesionales que trabajan en unidad coronaria, terapia intensiva, sala de emergencias y oncología pueden verse enfrentados con el hecho de tener comunicar malas noticias con mucha frecuencia y esto puede ser un motivo de gran ansiedad.
Los receptores de las malas noticias difícilmente olvidan dónde, cuándo y cómo les fue comunicada una mala noticia 
Es así que resulta imprescindible que los profesionales involucrados en estos procesos reciban educación y entrenamiento para adquirir habilidades para desarrollar una comunicación eficiente de malas noticias.

¿QUÉ ES UNA MALA NOTICIA?
Podemos definir mala noticia a aquella que drástica y negativamente altera la perspectiva del paciente en relación con su futuro. De esto se desprende que lo “malo” de la noticia depende de cuál es la perspectiva del paciente en relación con su futuro, perspectiva única e individual.
Las malas noticias suelen vincularse a situaciones terminales, pero incluyen otras, como informarle a una embarazada el hallazgo de una malformación en su hijo o a una adolescente que padece diabetes.
Además, un momento inadecuado podría ser otro ejemplo de mala noticia, como la necesidad de una angioplastia durante la semana del casamiento de una hija, o una incompatibilidad laboral, como el diagnóstico de temblor esencial en un cirujano cardiovascular.

Factores sociales
En este momento, la mayoría de las culturas occidentales tienen como principios básicos la juventud,
la salud y la riqueza. No se busca aquí abrir juicios de valor sobre estos conceptos, sino sólo señalar la
visión general en la mayoría de las naciones desarrolladas.
Aquellos que no reúnen estos principios son marginales: viejos, enfermos y pobres. Cuando le decimos a un paciente que está enfermo de algo le estamos diciendo que su valor .social. está disminuyendo.
Esta sensación es aún más dolorosa cuando la mala noticia implica el riesgo de morir.
Factores del paciente
Es muy difícil estimar el impacto de una enfermedad en un paciente desde nuestro propio conocimiento de
esa enfermedad. Muchos pacientes asumen con total naturalidad enfermedades que para nosotros serían tremendas.
El impacto de una enfermedad sobre un paciente puede evaluarse solamente en el contexto de la
propia vida del paciente. Existen técnicas (que se detallan más adelante) que nos permitirán entender mejor
el impacto de una enfermedad sobre el paciente.


jueves, 1 de noviembre de 2012

Recomendaciones para un buen uso y desarrollo de aplicaciones móviles de salud

La Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía ha elaborado una serie de recomendaciones que pretenden fomentar el buen uso y desarrollo de las aplicaciones móviles de salud. Estas recomendaciones están dirigidas a todos los colectivos: 

  1. desarrolladores
  2. profesionales sanitarios y 
  3. ciudadanía. 
La guía de recomendaciones se presenta en una versión alpha (borrador), abierta a la recogida de todo tipo de comentarios y sugerencias, con el fin de llegar a una versión definitiva lo más completa y útil posible.

Tiene 4 apartados con 31 recomendaciones que desde sus autores quieren que se amplíen con el fin de hacer una guía definitiva:

  1. Diseño y pertinencia:  Sus contenidos y servicios deben estar orientados para que puedan ser usados de forma eficiente, efectiva y satisfactoria por el mayor número de personas, sin necesidad de que estas tengan que recurrir a adaptaciones especiales. Para ello, la app de salud debería basarse en principios de Diseño Universal, sus contenidos y servicios someterse a un testeo por usuarios potenciales y, una vez desarrollada, definir de forma clara a quién va destinada, su finalidad y objetivos.

    Pertinencia: define de forma clara su alcance funcional y la finalidad con la que se ha desarrollado, identificando los colectivos a los que se destina la información y los objetivos que se persiguen con respecto a estos colectivos.

    Accesibilidad: sigue los principios del Diseño Universal, así como los estándares y recomendaciones de accesibilidad de referencia.

    Diseño: atiende a las recomendaciones, patrones y directrices de diseño recogidas en las guías oficiales que las diferentes plataformas ofrecen.

    Usabilidad/Testeo: ha sido testada con usuarios potenciales de forma previa a su puesta a disposición del público.

  2. Calidad y seguridad de la información: Orientadas a reforzar la credibilidad de los contenidos de la app, al informar sobre quiénes son sus responsables, las fuentes de información en las que se basa, sus fuentes de financiación, así como la existencia de posibles conflictos de intereses.

    Adecuación a la audiencia: se adapta al tipo de destinatarios al que se dirige.

    Transparencia: ofrece información transparente sobre la identidad y localización de sus propietarios. Proporciona información sobre sus fuentes de financiación, promoción y patrocinio, así como posibles conflictos de intereses.

    Autoría: identifica a los autores/responsables de sus contenidos, así como su cualificación profesional.

    Actualización de la información/revisiones: contiene la fecha de la última revisión realizada sobre el material publicado. Advierte de aquellas actualizaciones que inciden o modifican funcionamientos o contenidos sobre salud o cualquier otro dato sensible.

    Contenidos y fuentes de información: está basada en una o más fuentes de información fiable y toma en consideración la evidencia científica disponible.  Proporciona información concisa acerca del procedimiento utilizado para seleccionar sus contenidos. Se sustenta en principios y valores éticos.

    Gestión de riesgos: Se identifican los riesgos que el manejo de la app de salud puede suponer para la seguridad del paciente. Se analizan los riesgos y eventos adversos (o cuasiincidentes) de los que se tiene conocimiento y se ponen en marcha las actuaciones oportunas.

  3. Prestación de servicios: Recomendaciones sobre los servicios proporcionados por la app de salud:  guías de manejo que permitan entender la aplicación, mecanismos de contacto para posibles consultas y aspectos relacionados con el comercio electrónico y el uso eficiente del ancho de banda para descargas o la publicidad.

    Soporte técnico/consultasDispone de un sistema de ayuda sobre su manejo. La app de salud proporciona un mecanismo de contacto para asistencia técnica y soporte, garantizando un tiempo de respuesta determinado al usuario..

    Comercio electrónico: informa sobre los términos y condiciones con respecto a la comercialización de sus productos y servicios.

    Ancho de banda:  realiza un uso eficiente del ancho de banda de comunicaciones.

    Publicidad:  advierte del uso de mecanismos de publicidad y permite desactivar o saltar la misma.

  4. Confidencialidad y privacidad: Las recomedaciones de este bloque tratan de abordar las garantías exigibles a la app de salud en materia de protección de datos, habida cuenta del carácter especialmente protegido de la información sobre salud, así como los mecanismos de seguridad que implementa una app para garantizar la privacidad y confidencialidad de la información.


    La Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía, como ya comentamos en este blog, tiene varias APPS como`RecuerdaMed, `Pregunta por tu salud´ y "Comprueba" que registran descargas en más de 30 países y han obtenido el reconocimiento como uno de los  mejores proyectos e-salud.